La alcaldesa en funciones de San Bartolomé de Tirajana, Concepción Narváez, abrió ayer una vía de negociación con el sindicato UGT para alcanzar un acuerdo sobre el conflicto laboral que enfrenta al Ayuntamiento con centenares de trabajadores de la empresa Perfaler, quienes han recurrido a la vía judicial para lograr la incorporación a la plantilla municipal, pues muchos de ellos han sido contratados por esta compañía cuando en realidad prestan servicios directos a la institución local (cesión ilegal de trabajadores).Narváez se reunió con el secretario general de la organización sindical, Juan Francisco Fonte Moreno, quien ya solicitó en noviembre al gobierno municipal la relación de contratos firmados con Perfaler. En el encuentro Fonte se quejó de no haber recibido hasta el momento respuesta a su petición, que iba dirigida a la regidora de la Corporación, María del Pino Torres, quien se encuentra de viaje fuera de Gran Canaria desde la semana pasada."Lo mejor es parar la ejecución de sentencias para que no se conviertan en un balón de oxígeno" en manos de los trabajadores, sostiene Narváez, que también es partidaria de demostrar a los afectados la disposición del grupo de gobierno a resolver el conflicto de manera global antes de febrero.Para ello está prevista la creación de una comisión de trabajo en la que estarán representadas todas las partes afectadas, como ya se comprometieron los representantes municipales en una de las últimas sesiones plenarias celebradas. Según Narváez, la solución final pasa por "analizar los números para decidir si podemos afrontar o no a todas estas personas en plantilla". La premisa dada por los afectados al sindicato es lograr un arreglo en bloque igual para todos los empleados de Perfaler. Son unos 300.







